El gobierno departamental de Santander estudia las acciones necesarias para la reubicación de los asentamientos humanos de la zona de Chimitá.
Estos sectores subnormales se
encuentran sobre las tuberías que conducen gas natural y propano hasta las
plantas de distribución de este combustible en Bucaramanga y su área
metropolitana, factor que puede producir una explosión de graves consecuencias.
Las personas que están en
grave riesgo de ser afectados por una catástrofe son los habitantes de los
barrios Galán, Pizarro Leongómez, Primero de Mayo y Porvenir, ubicados sobre la
margen derecha del Río de Oro, sobre los gasoductos de propano y natural de las
plantas de Metrogas, Norgas, Gasan y Terpel.
Explorando soluciones
El asesor de Habitabilidad y
Vivienda de la Gobernación de Santander, Henrique Gómez Paris, informó que este
jueves se reunió con representantes de esas empresas con el propósito de
explorar soluciones que permitan la reubicación de estos asentamientos humanos.
Acciones de intervención
Gómez Paris informó que la
Gobernación de Santander se comprometió a verificar con los comités locales de
Gestión del Riesgo de Bucaramanga y Girón si esta situación ya fue evaluada y
remitida al Consejo Departamental del Riesgo, para gestionar acciones de
intervención de acuerdo a los procedimientos legales.
Los representantes de las
empresas afectadas por la permanencia de estas comunidades sobre sus gasoductos
solicitaron la gestión de la Oficina de Habitabilidad para garantizar una
servidumbre de 12 metros a la margen de la tubería, para hacer un cerramiento
de protección de la misma y garantizar elementos mínimos de seguridad en el
tramo del transporte de gas que es ocupado.
Fuente: Oficina de Prensa y
Comunicaciones
Gobernación de Santander
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