Y en esos instantes en los que se negociaba la entrega de armas y la paz, se cruzaron por primera vez Horacio Serpa y Antonio Navarro Wolf. Desde entonces, Navarro Wolf, el hombre que sobrevivió a un atentado, el de 'Palabra que sí', y Horacio Serpa, el que le hizo entender a un país que la lealtad no tiene precio, el que gritó 'mamola', cruzaron su vida en pro de un sueño de equidad, inclusión y paz. AMPLIACIÓN
LA CASA FLOTANTE Y LA RAÍZ PERDIDA: CRÍTICA A "ARRANCADO DE RAÍZ" DE 
LEANDRO ERLICH
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"—No nos iremos —dijo [Úrsula]—. Aquí nos quedamos,
 porque aquí hemos tenido un hijo. —Todavía no tenemos un muerto —dijo él—. 
Uno no es de ninguna parte...

  
