·La compañía da cumplimiento actividades de prevención y
compensación para mitigar impactos ambientales en la represa de Bocas o Palmas
Bucaramanga.- Respuesta a las observaciones
relacionadas con las descargas de la represa de la Subestación Bocas o Palmas,
hizo la Electrificadora de Santander, respecto al cumplimiento de las normas
ambientales.
El jefe del Área de Generación de ESSA, Javier
Enrique Sierra argumentó que “el Plan de Manejo Ambiental de la represa fue
aprobado por la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de
Bucaramanga, CDMB, y en él se establecen los procedimientos y las actividades
que deben cumplirse para preservar las condiciones bióticas del río Lebrija
durante la ejecución de los desembalses controlados”.
Al respecto se destaca que a la fecha ESSA ha dado
cabal cumplimiento de los compromisos ambientales establecidos con la CDMB,
dentro del Plan de Manejo Ambiental de la represa de Bocas, o Palmas, con el
fin de mantener los parámetros físico químicos, a través de los cuales se
realiza control de turbiedad, temperatura, oxígeno disuelto, solidos
sedimentables y pH, garantizado la conservación de las condiciones óptimas del
recurso hídrico y la supervivencia de la fauna íctica.
Una de las mayores problemáticas del río Lebrija es
la contaminación que se realiza aguas arriba de la represa, pues el río de Oro
afluente de este, recoge todos los vertimientos del área metropolitana de
Bucaramanga antes de su desembocadura.
En cumplimiento del fallo proferido dentro de una acción
popular, actualmente ESSA junto con los entes territoriales y la CDMB adelantan
el proceso de contratación de un estudio técnico para determinar
las labores que se deben adelantar con miras a solucionar la
problemática ambiental del río. La Empresa ha participado de forma activa en la
formulación de dicho estudio y ha establecido los compromisos necesarios tanto
financieros como técnicos para su materialización.
Además se ha implementado un protocolo de aviso al
Grupo Elite Ambiental, GEA de la CDMB para alertar a la autoridad de la
presencia ocasional de una mancha contaminante que se origina presuntamente por
el vertimiento indiscriminado de sustancias aguas arriba de la represa, que al
parecer ocasiona la muerte de las especies ícticas que habitan la cuenca
del rio Lebrija.
ESSA ha fortalecido su interacción con la
comunidad para de manera oportuna informar sobre la ejecución de los desembalses programados.
Así mismo como propósito empresarial y cuidado del medio ambiente, anualmente
se realizan mayores compensaciones a las exigidas en relación a la siembra de
alevinos de especies nativas de la cuenca.
En temas sociales, el desembalse de la represa de
Bocas, o Palmas, da trabajo aproximadamente a unas 80 personas de la región,
entre las actividades de limpieza y monitoreo del río; así mismo se hace un
trabajo directo con la Comunidad de pescadores, quienes se contratan para
revisar la situación de los peces en el ecosistema del río.
Estas siembras son auditadas por la Autoridad
Nacional de Acuicultura y Pesca, AUNAP, y verificadas por las autoridades
ambientales regionales, así como por las Asociaciones de Pescadores de la
Cuenca del río Lebrija. ESSA ha cumplido históricamente los objetivos con cada
proceso de repoblamiento íctico, apoyando la preservación de las especies
nativas del río Lebrija y apostándole a la sostenibilidad de la región.
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